
Ryo Tatsuki: La Nueva "Baba Vanga" Japonesa
La predicción de Ryo Tatsuki y su Impacto en el Turismo
La artista japonesa de manga Ryo Tatsuki, apodada la "Nueva Baba Vanga", ha desatado un debate mundial tras predecir un posible desastre natural en Japón el 5 de julio de 2025. Esta predicción, documentada en su obra "El Futuro que Vi", está teniendo un impacto significativo en el turismo japonés, con una fuerte caída en reservas de países como Hong Kong, China, Tailandia y Vietnam. Las cancelaciones aumentaron hasta un 83% entre finales de Junio y principios de Julio, lo que llevó a las autoridades japonesas a abordar la situación y minimizar la alarma, aunque el temor persiste, alimentado por la reputación de Tatsuki de predecir previamente eventos como la muerte de Freddie Mercury, el tsunami de Tohoku de 2011 y la pandemia de COVID-19.
Precisión y Controversia
Ryo Tatsuki no es una figura común; se ha ganado su apodo debido a la notable precisión de sus predicciones a lo largo de las décadas. Desde la década de 1980, ha documentado sus sueños vívidos en sus mangas, incluyendo eventos como el terremoto de Kobe de 1995 y la trágica pérdida de la princesa Diana. Esta capacidad predictiva, similar a la del famoso búlgaro Baba Vanga, ha generado tanto admiración como escepticismo. Mientras que algunos ven sus sueños como la manifestación de un talento extraordinario, los científicos descartan cualquier evidencia concreta que respalde estas habilidades y señalan predicciones fallidas, como su predicción sobre su propia muerte en el año 2000 o el fracaso de una erupción del Monte Fuji. Sin embargo, su capacidad para anticipar eventos significativos ha consolidado su reputación como una figura prominente para muchos.
Su advertencia actual
La predicción que genera mayor preocupación actualmente es la de un tsunami "tres veces mayor" que el devastador evento de 2011, el cual ocurriría el 5 de julio de 2025. Tatsuki describe una visión en la que el Océano Pacífico al sur de Japón parece estar en ebullición, lo que sugiere una posible erupción volcánica submarina o una ruptura masiva entre Japón y Filipinas, con una zona de impacto en forma de diamante que abarcaría Taiwán, Indonesia y las Islas Marianas. Si bien los expertos reconocen la actividad geológica de la zona, en particular la amenaza de la Fosa de Nankai (una falla capaz de generar un megaterremoto), insisten en que predecir el momento exacto de un evento sísmico es imposible con la tecnología actual.
¿Pánico justificado o desinformación en redes sociales?
La predicción de Tatsuki ha desatado una ola de histeria en redes sociales, con la etiqueta #July2025Prediction siendo tendencia en plataformas como Weibo, TikTok y X. Se comparten imágenes de kits de supervivencia, memes apocalípticos y análisis del trabajo de Tatsuki, lo que contribuye a un clima general de temor. Aunque las autoridades japonesas intentan minimizar la alarma, instando a los turistas a ignorar los rumores y visitar el país, las ventas de equipos de supervivencia han aumentado significativamente. Además de la predicción del tsunami, Tatsuki también ha advertido sobre un posible resurgimiento de una pandemia en 2030, incluso más devastadora que la de COVID-19, lo que añade más inquietud a la situación.
El Futuro Apocalíptico Según Tatsuki
La influencia de Ryo Tatsuki no se limita a los eventos inminentes; su trabajo también contempla un futuro más lejano marcado por nuevas catástrofes. Su visión de una pandemia en 2030, describiéndola como «un virus desconocido que llegará en 2020, alcanzará su punto máximo en abril y reaparecerá 10 años después», añade una dimensión apocalíptica a sus predicciones. Esta capacidad de preveer eventos futuros, sumada a la reciente caída del turismo en Japón y al debate sobre la validez de sus visiones, ha convertido a Ryo Tatsuki en una figura central en un mundo cautivado por la posibilidad de lo desconocido.
La propia Tatsuki insta a la cautela, aconsejando a la gente «no dejarse influenciar innecesariamente... y escuchar las opiniones de los expertos». Se cumplan o no sus predicciones, el fenómeno del "Nuevo Baba Vanga" sirve como recordatorio de la perdurable fascinación de la humanidad por las profecías y de nuestra vulnerabilidad colectiva ante los desastres naturales.